Aspectos que el docente ha de tener en cuenta en relación al Trastorno por Déficit de Atención y/o Hiperactividad:
Es importante la ubicación dentro del aula, deben estar cerca del profesor/a. Y, en la medida de lo posible, se han de evitar elementos de distracción (puertas y ventanas, otros niños movidos…).
En general, les cuesta manejar los cambios. Motivo por el cual se deberán evitar, siempre que sea posible, las reubicaciones físicas frecuentes, los cambios de horario, las interrupciones y los cambios de clase y/ o asignatura.
Tutorizar y supervisar al niño de forma continuada y frecuente. Proporcionar instrucciones claras y concisas. Las normas de comportamiento han de ser muy claras y las ha de tener siempre presentes. Por ejemplo, enganchadas al pupitre, a la carpeta…
Repetir múltiples veces la información verbal transmitida en el aula que el profesor considera más relevante, ya que frecuentemente se distraen, perdiendo la información que se transmite oralmente.
Transmitir instrucciones verbales usando frases concretas, sin circunloquios y de una complejidad estructural adecuada al niño o niña. Evitar dar múltiples órdenes a la vez y proporcionar las tareas una por una en lugar de muchas a la vez. En caso que el infante no comprenda la orden se le repetirá simplificando la estructura de la frase.
Asegurarse de que ha entendido las instrucciones antes de comenzar la tarea.
Acostumbrarlo a pedir ayuda cuando sea necesario.
Puede ser preciso revisarle la agenda y hacerle tomar consciencia de su uso. Se ha de revisar que las anotaciones de los deberes y exámenes son correctas y que lleven el material adecuado a casa.Repetirle auto-instrucciones para integrarlas en su día a día y poder reproducirlas él solo: “me paro, miro, decido, sigo, repaso”, “me paro, pienso, decido y actúo”…
Facilitar la organización manteniendo rutinas, estableciendo pautas claras, enseñándole a hacer listas y a establecer prioridades.
Captar su atención y mantenerla motivándole, avisándole en momentos en que es necesario estar muy atento y, entre otras, ser breve en las consignas.
Formular preguntas durante las explicaciones para reforzar la comprensión de la explicación.
Disminuir el número de preguntas muy largas y/o abiertas en un facilitará que el niño muestre su conocimiento en los exámenes.
Se le debe ayudar a fraccionar el trabajo, con el objetivo de conseguir periodos cortos pero intensos.
Mejorar la autoestima reconociendo en público sus éxitos y regañando en privado.
Dar responsabilidades en el aula que le permitan moverse, como repartir las hojas o borrar la pizarra, para evitar, o si disminuir, conductas disruptivas en el aula.
Intentar que no se sienta “diferente” favoreciendo su integración y participación en el aula.
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